La relación de pareja es un compromiso, un trabajo arduo de acuerdos, de ceder y conceder, un continuo cuidado de nuestra persona y de nuestro trato hacia el otro, sin embargo, en el ajetreo del diario vivir, lleno de horarios que cumplir, de responsabilidades que cubrir, se da por hecho el amor y se deja de procurar aquello que lo alimenta.
Siempre lo llamo el nuevo “jarrón de flores en casa”; cuando compramos un nuevo jarrón para flores el cual ponemos en casa, con el objetivo de que adorne el ambiente, siempre estamos al pendiente de que tenga agua, este limpio, tenga flores nuevas y olorosas; pero al paso del tiempo vamos olvidando a este jarrón y solo le damos unos vistazos, que tenga flores, que tenga agua, después que tenga agua, hasta que un día solo le quedan las flores marchitas.
Si no cuidamos nuestra relación, si no vemos cada detalle, si dejamos que la monotonía aparezca, la frialdad, la indiferencia, entonces dejaremos que nuestro amor se marchite y cambie de lugar. Preguntándonos que fue lo que paso, si estábamos bien, lamentando el tiempo que hemos perdido y muy difícilmente de recuperar.
- La unión de la pareja tiene que respetar la singularidad de cada uno como persona individual, las diferencias les complementarán. El amor en ocasiones lleva a sentimientos de fusión lo que ocasiona temor a quedar atrapado en la relación y perder esa individualidad, motivo por el cual la flexibilidad y respeto los espacios individual y de pareja son imprescindibles.
- Las diferencias también son fuente de conflicto ya que se espera que la otra persona sea como uno es, éstas se resuelven con una comunicación abierta, una actitud positiva, reflexiva. El poder decir lo que se siente y piensa sin que la pareja se enoje. Cuando la actitud es defensiva y solo se devuelve el “pero tu también” se empantanan sin llegar a soluciones. Pasa lo mismo si al hablar se gritan, solo se escuchará el grito y no lo que se dice, no resuelve nada.
Recordemos que casa individuo tiene su historia, su formación, sus ideales y estos deben ser respetados. NO trates de cambiar la esencia de tu pareja por que esto solo los va a llevar a discusiones, malos entendidos y frustraciones por habas partes. Aceptarse como son, cambiando lo que sea positivo para la pareja o llegando a acuerdos donde los dos se sientan cómodos en la relación.
- Para ser asertivo en la comunicación, menciona lo que no te gusta o los cambios que deseas en tu relación y también habla de lo que te gusta, esto es, cierra la conversación hablando de las cualidades positivas de tu pareja.
- Procura tener claro lo que sientes, necesitas o piensas, para poderlo pedir. En ocasiones se espera que la pareja lea el pensamiento y entienda lo que tu no puedes expresar y al darse cuenta que no te entendió, el resentimiento no se hace esperar, sin darte cuenta que no has sido claro al comunicarte.
Por ejemplo, si necesitas su ayuda, pídesela y recibe lo que te brinda, no lo hará como tu lo harías recuerda: son diferentes.
- La sordera.. Sucede frecuentemente que la pareja pide cambios y como no resuenan en lo individual como algo importante, no hacemos caso a lo que nos piden, lo que da por resultado resentimientos, sentimientos de impotencia y frustración. Lo que para ti no es importante, puede ser muy importante para tu pareja: escucha con atención.
Considero importante que tomes atención a las peticiones, mensajes, comentarios o necesidades de tu pareja, tal vez para ti no suene tan importante pero para el o ella si lo es y en algún momento tu pudieras estar del otro lado, buscando algún cambio o apoyo en alguna situación y no te gustaría que tu pareja si hiciera de odios sordos.
- La ceguera: Si tu pareja constantemente esta molesta, o se ha vuelto reservada, o se queja, tenemos que pensar que algo esta sintiendo para que reaccione así. Interésate por su salud, pregúntale cómo se siente, que le sucede, no te acostumbres al “así es”, tu puedes observar algo que posiblemente esta pasando desapercibido para tu pareja.
No te pido que estés pegada o pegado a sus necesidades las 24 horas del día, pero en ocasiones podemos tener un día difícil y solo necesitamos una palabra de aliento.
- Si los silencios se hacen tensos, si han dejado de comunicarse tendrán que trabajar en que les sucedió. Seguramente al hablar de las diferencias se criticaban y esto da por resultado el ya no querer hablar.
La comunicación es esencial para una buena relación, comunicar como te sientes, como a trascurrido tu día, si tienes alguna dificultad, si solo quieres conversar. Dejar de lado esta fuerte herramienta solo te llevara a ser un desconocido para tu pareja. NO tengas miedo de expresar lo que necesitas.
- Continúen siendo atractivos para su pareja, traigan algo novedoso a su relación, arreglo personal, cambios en la casa, lugares nuevos, esto mantiene viva la relación de pareja.
Una relación de pareja es compleja y conlleva estar siempre al pendiente para seguir cultivando el amor, pero todo vale la pena si al final del camino son dos personas que aun sienten comprensión, atracción, complicidad y amor.
Psic. Graciela Hernández
Psicólogos Tijuana